MOSAICO MEXICANO

Cuántas veces no hemos escuchado hablar del famoso mosaico mexicano, el cual nos hacía referencia a la multiplicidad de etnias existentes en nuestro territorio, que de cierta forma, debido a la extensión territorial y el desarrollo tan dispar que han tenido el norte, centro y sur del país, ha representado un obstáculo para formar una nación con un objetivo común.
Actualmente ese mosaico que era en su momento básicamente étnico, se ha acentuado ya no tanto por el origen de alguien sino por los intereses (cada vez más radicales), que manifiestan los grupos de poder.
Los enfrentamientos en nuestro desgarrado México ya no es por ser un Lacandón o Tarahumara, un Seri o un Zapoteca, un Mestizo o un negro, no, eso ya pasó a la historia; ahora las diferencias que nos impiden avanzar son quizá más graves como lo es el ser tricolor, amarillo, azul, verde etc., o ser testigo de Jehová, católico, cristiano, etc. etc.
Las irresponsables posturas que manifiestan los líderes políticos, religiosos o empresariales a través de los medios que cada quien tiene a su alcance (llámese mitin, misa o “programas de análisis” en radio o tv), nos han ido empujando al radicalismo medieval de ponerle un San Benito o quemar al prójimo que no sea acorde a nuestra forma de pensar.
Realmente es triste ver como López Obrador o Felipe Calderón resultan ser el anticristo o un ungido (nada de términos medios), de acuerdo al nivel social al que se pertenezca. Que leyes como la decisión de seguir o no un embarazo, casarse con quien mejor le parezca a uno o adoptar un niño sólo si se profesa cierta religión, sirva como pretexto a grupos radicales para enfrentar a los mexicanos y lograr así mantener o ampliar sus cotos de poder.
En fin, ese es nuestro verdadero mosaico, que si sigue como pinta, veremos en el corto plazo a Garridos Canabales o Cristeros enfrentados de nueva cuenta hasta la muerte.
Con mis mejores deseos a todos para que tengan un 2010 de bienestar físico y económico…Cacho.