(O lo que es lo mismo “Un Madrazo a la mala”)
Y sigue la mata dando….
Señora y señores, les comunico que acaba de entrar a la carrera por enlodarse un nuevo competidor: Roberto… Madrazo… y a la mala, que como siempre, llega tarde. Pero al igual que en los maratones que ha participado hará alguna marrullería para robarle los reflectores a Ahumada.
Estoy empezando a creer que todos estos especímenes llamados políticos o pseudoempresarios, sienten que al defecar sus experiencias sobre papel y publicarlas, van a expiar sus culpas y lograr así la redención (De todos modos aquí en México todo se puede).
Ahora le tocó al despojo, perdón, a Roberto Madrazo hacernos partícipe de sus “reflexiones” (o serán deposiciones), en un remedo de libro que estarían peleando editoras tan famosas como “alarma”, “Metro” u “Orale”. Y todos preguntamos ¿Por qué hasta ahora? ¿Habrá algo nuevo? ¿Cuál es el fin? Y seguiremos igual ¡lo peor es que sí! Seguiremos igual, siendo el pueblo de La bruja de Jibrán Jalil Jibrán, bebiendo de la fuente, enloqueciendo cada día más. Si, de esa fuente desinformativa alimentada por “periodistas” que se niega a asumir su responsabilidad ante la sociedad.
De lo que si estoy convencido, es que no fue la influenza lo que enfermó a México, sino una diarrea crónica y sumamente contagiosa que provoca locura, a grado tal que los reyes del poder confunden una simple taza de wc con un ventilador.
Así que no nos sorprendamos de los días por venir, ya surgen los despojos pútridos; prepárense, que el aire que respiraremos durante estás semanas será tan fétido como el proceso del julio venidero.
Antonio Arceo Levario
Cacho.
domingo, 7 de febrero de 2010
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