Hace varios años, el gobierno lanzó un programa con el cual iba a disminuir la contaminación que agobiaba a la ciudad de México. En principio era voluntario y pretendía que un número x de autos dejaran de circular por un día, para lo cual, uno pegaba una calcomanía de un color determinado que indicaba precisamente que día dejábamos de utilizar nuestro auto.
Con el tiempo, esta propuesta de ser opcional la hicieron obligatoria. Surgieron los verificentros y empezaron a cobrar por dicho servicio y obviamente surgió paralelamente la eterna “mordida”.
Han pasado ya varios años que inició el “Hoy no circula”, y nos hemos dado cuenta que resultó ser un impuesto más que hábilmente el gobierno disfrazó.
Actualmente, surge otro programa voluntario para que el gobierno “nos ayude a protegernos”. Éste consiste en registrar nuestro número celular para que así no seamos victimas de la delincuencia (intuía que había “gato encerrado”, pero no alcanzaba a ver dónde podía estar el truco para “jodernos”).
Fortuitamente conocí un funcionario del SAT (Servicio de Administración Tributaria), con el cual empecé a platicar de los diferentes medios que se vale el gobierno para recaudar impuestos, y me comentó que para acentuar nuestra desgracia estaban pensando en una medida más: El registro de celulares.
Éste proyecto tiene el propósito de crear un padrón de usuarios, situación que le daría la posibilidad a Hacienda de saber a quién cobrar IMPUESTOS por el uso de estos aparatos ¡Imagínense si van a dejar ir esta forma de recaudación! Para que se den una idea, existen alrededor de 56 millones de estos aparatos en el país.
Yo no se hasta cuando pueda usar mi celular sin registrarlo, lo que si sé, es que si no reflexionamos que hay detrás “de la buenas intenciones del gobierno” no podremos prevenir sus consecuencias y tendremos además de la famosa Tenencia y el corrompido Hoy No Circula, El IMPUESTO POR USO DE TELÉFONO CELULAR.
Cacho.
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