viernes, 21 de mayo de 2010

PAULETTE, UN CASO INOLORO QUE SE FUE AL INODORO.

Hoy 21 de mayo, tuvimos ya las conclusiones de la Procuraduría del Estado de México en voz de su “flamante” director Sergio Baz Baz, acerca del polémico caso de la muerte de la niña Paulette.
El “docto” procurador, en conferencia de prensa (después de varias semanas), hace saber a la sociedad a través de “los medios de comunicación”, las conclusiones de la investigación acerca de tan polémico caso: ¡FUE ACCIDENTAL SU MUERTE!
Son increíbles tales declaraciones después de todo lo sucedido, ya que arraigó a los padres y las nanas; Llevó a la élite de investigadores con todo y perros (incluyendo a los del FBI); catearon el lugar; investigó al supuesto amante de Farah; desnudó los problemas familiares de los afectados; reconstruyó varías veces los hechos, en conclusión: destrozó a varias personas y ahora sale “valientemente” a decir que se cometieron errores.
Sí Sergio “Vas Vas” (a chin… a tu ma), esta vez sí la regaste feo, ya que te falló el olfato al igual que a tus peritos, ya que nunca mencionaste algo sumamente importante: que un olor fétido no pasa desapercibido.
¿Quién sabe que haya detrás de todo esto? Pero sigo pensando que esta gavilla de ineptos creen que la sociedad sigue siendo párvula y que todo se traga. Que por estar apoyado por el supuesto “ungido” gobernador Peña Nieto nada va a pasar y todo se olvidará, pero, siempre el pero: se le olvidó decirnos a este ingenuo procurador, cómo en diez días del fallecimiento de una persona no percibieron el fétido olor de la muerte y las terribles moscas que aparecen alrededor del cadáver para festinar un ocaso.
Sí, se percibe un olor a muerte, esa que reafirma la dualidad: morir para nacer. La sociedad sabe que llegó el momento del sacrificio y que ya no puede esperar el parto; será doloroso, pero es la forma de abonar la tierra de un nuevo México que busca extirpar el cáncer político que lo está matando.
Allá ellos si creen que esto no huele, ellos ya apestan y se tienen que ir al retrete de la historia.
Cacho.

miércoles, 19 de mayo de 2010

DIEGO, EL VIEJERIO Y LOS DESCALZONADOS

El sábado 15 de mayo, nos enteramos poco a poco durante el transcurso del día, de la desaparición de Diego Fernández de Ceballos, apodado “el jefe Diego”. La información al respecto, ha sido dada a cuenta gotas y con cautela. Las primeras notas que mencionaron el hecho, llamaron la atención, debido a que en todo momento hablaron de desaparición; otro “comunicador” se tomó la libertad de expresar según él, la consternación del pueblo de mexicano.
Posteriormente, el lunes 17 de mayo, Joaquín López Dóriga, en su noticiero dio a conocer la postura de Televisa: “Por respeto a la familia de Diego y para no comprometer su integridad física no iban a mencionar nada acerca del hecho hasta que se resuelva la incógnita”.
Yo pregunto, si este famoso capo apodado “el jefe Diego”, realmente ha consternado al viejerío y a los descalzonados, que a través de su obscura trayectoria los ha desposeído de sus tierras (Punta Diamante, por ejemplo), dejando a millones con una deuda impagable (Fobaproa); negándoles el derecho a la verdad (quema de boletas del proceso electoral de 1988 en un incendio de origen desconocido), etc., etc.
Por otro lado: ¿cuándo ha respetado Televisa el dolor ajeno en este tipo de casos? Ya habrán olvidado que también fueron cómplices en la tragicomedia que montó García Luna con el caso de la francesita acusada de secuestradora y, que en su momento, entrevistaban con imágenes y toda la cosa de la secuestrada y a su esposo, importándoles un bledo su integridad.
Dice el dicho: no hay que desear a nadie lo que uno no quiere para sí mismo, pero en el caso de que esta “desaparición” no sea una farsa del gobierno y tenga un funesto desenlace, no podemos negar que este capo institucional a hecho todo lo inimaginable para terminar como todos los de su clase.
Cacho.

domingo, 11 de abril de 2010

MÉXICO EN LLAMAS

Dicen que los mexicanos somos broncos por naturaleza y que todo lo queremos arreglar a madrazos: Que se descompone la lavadora, tan fácil –ponle un madrazo a ver si “camina”-; que se trabó la puerta -pues dale un madrazo para que se abra-; que se le quedó viendo a mi vieja-tranquilo güey o te pongo un madrazo. ¿Esta forma de ser, será consecuencia del sometimiento del que hemos sido objeto desde hace siglos? Primero por los españoles y sus “evangelizadores colonizadores” (no sé si ya eran pederastas desde ese tiempo); luego los hacendados, con Porfirio Díaz y sus científicos; ahora los rapaces “empresarios” y sus neoliberales políticos lacayos.
Por una causa u otra siempre nos alcanza el destino. Nuestra herencia está marcada y está resultando cíclica y apocalíptica, y al parecer estamos condenados lamentablemente a repetir nuestra trágica historia: arreglar nuestro futuro a madrazos.
Pero qué más podemos hacer sino defendernos a madrazos , los que no tuvimos o tenemos vínculos con los Alemán, los Azcárraga, los Ávila Camacho, los Velázquez (Fidelito), los Mateos, los González (Hank), los Díaz Ordaz, los Echeverría, los Servidje, los De la Madrid, los Salinas (Pliego y De Gortari), los Slim, los Gordillo, los Hernández (Juárez Y Roberto), los Zedillo, los Fox, los Sahagún, los Calderón, los Mouriño, los Nava, los Peña Nieto, los Beltrones (el verdadero padrino), los Paredes, los Guzmán (chapitos),los Quintero, los Beltrán, los Zambada, y tantos más que se me escapan, que son muchos y pocos a la vez, que conforman esas pocas mafio-familias que controlan el país.
Sí, el crimen organizado ha sentado sus reales en el país desde hace varios sexenios ¿No decían que en los tiempos de Alemán robó pero dejo robar?
Ya no sabemos quién es quién, y lo peor, es que estamos como el huevo y la gallina ¿Primero fueron mafiosos para gobernar o el “gobernar” sin freno los hizo mafiosos? El velo se ha hecho tan sutil que ya no se ve la diferencia entre un criminal y un gobernante, ambos muestran su desprecio al país y las leyes que lo rigen. Unos manipulándolas y otros transgrediéndolas abiertamente, pero todos con el fin mismo fin: crear fortunas lo más pronto posible como sea y a costa de lo que sea.
As,í vemos a diario cómo los empleos formales y legales languidecen y por otro lado se robustecen los trabajos informales e ilegales.
Aparecen a diario puestos ambulantes invadiendo las calles, con los que la gente trata de mantenerse (hasta donde les permite su necesidad), honestamente. Vendiendo tacos sudados (por el vendedor y los papeles de la canasta); “ropa casi nueva recién desempacada” (de la paca por supuesto); perfumes recién envasados en frascos reciclados de “Pancho Rábano” y “Christian Pior”; whiskys y brandis salidos de las inacabables cavas de tepito; o cd´s de música o películas recién quemaditas que ni siquiera se han estrenado.
Por otro lado, se van robusteciendo esos “molestos” ejércitos de gente con poca escuela o de plano analfabetas, ocupándose de limpiaparabrisas que parecen estopas de mecánico, que al quitarles el polvo a nuestro vidrio nos muestran en plena cara las imágenes de nuestro retroceso; o de Faquires improvisados que se “aceitan” la garganta con varios tragos de petróleo para impresionarnos, no con sus flamígeras bocanadas sino con sus cuerpos clavados a la piel por esos huesos que denotan una desnutrición perenne ; Payasos, payasas y payasitos, que en lugar de darnos risa casi nos arrancan las lágrimas por que nos enseñan el trágico circo que vivimos; de aprendices de malabaristas, que realmente lo que hacen son malabares para llevarse un pan a la boca al igual que cualquiera de nosotros; de los “viene viene”, que dan miedo con esa frase, porque parece ser una invitación a acompañarlos en el futuro si nos descuidamos. Y para terminar esta inacabable lista, esas miles de personas que aparecen de la nada en cualquier punto donde haya caos vial, para ofrecernos desde unos cacahuates japoneses hasta un juego de herramientas “baratas”.
Pero lo que esas mismas personas que se quejan y se niegan a ver, es que todas estas gentes son el resultado de la falta de educación y oportunidad de desarrollo.
¡Aguas Con esa gente que se emplea con quien mejor pague!, la cosa es dar de comer a la familia. Ahorita son los ejércitos de empleados informales y narcomenudistas (muchos de ellos por necesidad e ignorancia). Ya sintieron los madrazos ¿Quién dice que no sean ellos los que se alebresten y logren el equilibrio que tanto necesita nuestra nación?
Por supuesto que existe una guerra en nuestro país, los muertos no mienten y nosotros (los jodidos), los ponemos. Pero lo peor, es que los que somos mayoría no queremos la violencia, pero esos gavilleros de ambos bandos (institucionales y no), nos están empujando a enfrentarlos y resolver nuestro futuro a madrazos.
Cacho.

sábado, 20 de marzo de 2010

LOS QUE MUEVEN A MEXICO

DENISE DRESSER
LEELO DETENIDAMENTE Y CON EL CORAZON Alguna vez, el periodista Julio Scherer García le pidió a Ernesto Zedillo que le hablara de su amor por México. Le sugirió que hablara del arte, de la geografía, de la historia del país. De sus montañas y sus valles y sus volcanes y sus héroes y sus tardes soleadas. El ex-presidente no supo qué contestar. Hoy es probable que muchos mexicanos tampoco sepan cómo hacerlo. Hoy el pesimismo recorre al país e infecta a quienes entran en contacto a él. México vive obsesionado con el fracaso. Con la victimización. Con todo lo que pudo ser pero no fue. Con lo perdido, lo olvidado, lo maltratado. Con la crónica de catástrofes; de corruptelas; de personajes demasiado pequeños para el país que habitan. México padece lo que Jorge Domínguez, en un artículo en Foreign Affairs, bautizó como la "fracasomanía": el pesimismo persistente ante una realidad que parece inamovible. La propensión colectiva a pensar que la corrupción no puede ser combatida; que los políticos no pueden ser propositivos; que la sociedad no puede ser movilizada; que la población no puede ser educada; que los buenos siempre sucumben; que los reformadores siempre pierden.. Por ello es mejor callar. Es mejor ignorar. Es mejor emigrar. Pero lo que nos congrega aquí hoy sugiere lo contrario. Por cada tache que se le pueda colocar a este país, existe una paloma. Más de 50 palomas..Frente a todos los motivos para cerrar los ojos están todos los motivos para abrirlos. Frente a las razones para perder la fe en México estan todas las razones para recuperarla. La determinación de Lorena Ochoa. La pluma de Carlos Fuentes. La inteligencia de Mario Molina. El profesionalismo de Carlos Loret de Mola. El talento de Salma Hayek. La chispa de Diego Luna.. La visión empresarial de María Asunción Aramburuzavala. La imaginación de Angeles Mastretta. El humor de Carlos Monsivaís. La tenacidad de Alejandra de Cima. La sencillez de Gael García Bernal. Las canciones de Julieta Venegas. El espíritu democrático de Margarita Zavala. La creatividad de Julieta Fierro.. La forma en la cual Alondra de la Parra conduce una orquesta o Rafael Márquez mete un gol o Cristina Pacheco hace una entrevista.. La labor filantrópica de Alfredo Harp Helu. El periodismo implacable de Miguel Angel Granados Chapa. La arquitectura de Teodoro González de Leon.. La voz de Ximena Sariñana. Los huipiles de Beatriz Paredes. Cada persona tendrá su propia lista, su propio pedazo del país colgado del corazón. Una lista larga, rica, colorida, voluptuosa, fragante.. Una lista que debe comenzar con las palabras de la chef Marta Ortiz Chapa: "Siempre me gusto ser mexicana". Una lista con la cual contener el pesimismo; un antídoto ante la apatía; una vacuna contra la desilusión. Una lista de lo mejor de México. Una lista para despertarse en las mañanas. Una lista para pelear contra lo que Susan Sontag llamó "la complicidad con el desastre".Una lista como la compilada por la revista "Quien" hoy pero que en mi propio caso va más allá de ello para incluir todo lo que yo amo de mi país. Los murales de Diego Rivera. Las enchiladas suizas de Sanborns. Las mariposas en Michoacán. El cine de Alfonso Cuarón. El valor de Emilio Alvarez Icaza. Los huevos rancheros y los chilaquiles con pollo. El mole negro de Oaxaca . Los libros de Elena Poniatowska. La decencia de Germán Dehesa. Los tacos al pastor con salsa y cilantro. El mar en Punta Mita. La poesía de Efraín Huerta. El Espacio Escultórico al amanecer. Cualquier Zócalo, cualquier domingo. La forma en que los mexicanos se besan y se saludan y se dicen "buenas tardes" al subirse al elevador. Las fiestas ruidosas los sábados por la tarde. La casa de Luis Barragán. Los amigos que siempre tienen tiempo para tomarse un tequila. Los picos coloridos de las piñatas. Las casas de Manuel Parra. Las bugambilias y los alcatraces y los magueyes. Las caricaturas de Naranjo y los cartones de Calderón. El helado de guanabana.La talavera de Puebla . Las fotografías de Graciela Iturbide. Los mangos con chile parados en un palo de madera . Las comidas largas y las palmeras frondosas. Las mujeres del grupo Semillas y las mujeres que luchan por otras - todavía - en Ciudad Júarez. Y más allá de este recinto y este reconocimiento a cincuenta personas, habría que aprovechar la ocasión para pensar un momento en todos aquellos que también mueven a México. Sus habitantes. Ese país habitado por millones de hombres y mujeres mexicanas que se levantan al alba a prender la estufa, a preparar el desayuno, a remojar el arroz, a planchar los pantalones, a terminar la trenza, a correr detrás del camion, a trabajar donde puedan y donde les paguen por hacerlo. El país de muchas mujeres y hombres que duermen poco porque cargan con mucho. Para acompañarlos les pido que piensen por un momento en las siguientes preguntas. Y si ustedes vivieran y mantuvieran a sus familias con 3,000 pesos al mes? Y si les tomara más de dos horas y tres formas diferentes de transporte público llegar a su trabajo? Y si al regresar a casa, después de un largo día, su esposo las golpeara? Y si, aunque ustedes contaran su caso cientos de veces, prevaleciera el silencio? Y si su hija o su madre o su hermana fuera violada en la calle o cerca de un cuartel del Ejército? Y si en el Ministerio Público le dijeran que ella se lo buscó o que lo ocurrido no es un crimen? Y si resultara embarazada y la despidieran por ello? Y si hubiera complicaciones y no pudiera pagarle al médico? Y si ustedes estuvieran condenadas a la precariedad cotidiana como tantas más?Para muchas mujeres en México esas preguntas no son hipotéticas sino reales. No representan lo que podría ocurrir sino lo que ocurre. En México, ser mujer entraña tener sólo 7 años de escolaridad promedio. En México ser mujer y trabajar en una maquiladora significa estar en peligro de muerte. En México, ser mujer implica el 30 por ciento de probabilidad de tener un hijo antes de los 20 años. En México todavía entraña luchar por el derecho a serlo. Porque el país cambia pero no lo suficiente; porque México se mueve pero no a la velocidad que podría y debería. Algo está mal. Algo no funciona.Tiene que ver con el control y los privilegios. Tiene que ver con 23 millones de personas en este país que viven con 20 pesos al día. Tiene que ver con que 1 de cada 5 mexicanos entre la edad de 25 y 35 años vive y trabaja en Estados Unidos. Tiene que ver con el éxodo de 400,000 migrantes que cruzan la frontera en busca de oportunidades que no encuentran en su propio país. Con que el hijo de un obrero tiene solo el 5 por ciento de probabilidades de convertirse en profesionista. Allí están para quien las quiera ver: señales claras de un statu quo que es insostenible; síntomas de problemas profundos, históricos, estructurales. A lo largo del sur del país y a lo ancho de sus zonas más pobres. En cada institución disfuncional y en cada funcionario insensible que la encabeza. En cada decisión arbitraria por parte de alguien que ejerce el poder y en cada mexicana que padece sus consecuencias.De allí que se vuelva imperativo celebrar a aquellos que están en la lista de quienes mueven a México, y al mismo tiempo reflexionar en lo mucho que falta por hacer. Pensar en un México menos cupular y más ciudadano. Menos elitista y más democrático. Menos interesado en retener las oportunidades insólitas que tienen algunos y más interesado en crearlas para otros. De lo que se trata, en esencia, es de cambiar la forma geométrica del país.Pasar del triángulo al rombo. Crear una amplia clase media poblada por personas con voz, con derechos, con oportunidades para generar riqueza y acumularla. Crear mexicanos, emprendedores, educados, competitivos, meritocráticos porque el país les permite serlo. Crear un sistema económico que promueva la movilidad social en vez de permitir la perpetuacion de obstaculos que la inhiben. Y vivir todos los días con esa lista de lo mejor y lo posible para así pelear contra la lógica enraizada del "por lo menos": "por lo menos hay paz social; "por lo menos" la pobreza extrema ha disminuido un poco; "Por lo menos no ocupamos el último lugar en las evaluaciones PISA de educación". "Por lo menos en el sexenio pasado sólo se robaron un Jeef Rojo y una Hummer". Hoy, la lógica compartida del "por lo menos" equivale a una defensa de la mediocridad. Equivale a una apología del statu quo que beneficia a pocos y perjudica a muchos. México solo será un país mejor cuando sus habitantes dejen de pensar en términos relativos y empiecen a exigir en términos absolutos. Cuando se conviertan en profetas armados con una visión de lo que podría ser. Cuando empuñen lo que Martin Luther King llamó "coraje moral". Cuando vociferen que los bonos sexenales y la rapacidad de los sindicatos y la educación atorada y el desempleo constante y la inseguridad lacerante son realidades que ningún mexicano está dispuesto a aceptar. Porque si nadie alza la vara, el país seguirá viviendo - aplastado - debajo de ella. Porque si sólo 50 personas exigen que las cosas cambien, nunca lo harán.Porque si los mexicanos siguen habitando el laberinto de la conformidad, será muy difícil sacudir al país desde allí.Quienes pueblan esta lista saben que hay tanto por hacer; tanto por cambiar; tantos sitios donde amontonar el optimismo. El optimismo de la voluntad frente al pesimismo de la inteligencia. El optimismo perpetuo que se convierte en multiplicador.El optimismo que debe llevar espero - a cada uno de los presentes - a hacer una declaración de fe, como la frase que acuñó Rosario Castellanos.Una filosofía personal para ver y andar, vivir y cambiar, participar y no sólo presenciar.Una filosofía para compartir la terca esperanza de quien habla hoy y acompaña a los premiados. La convicción inquebrantable de mejorar a México. De restañar a la República. De volver a México un país de ciudadanos. Un lugar poblado por personas conscientes de sus derechos y dispuestos a contribuir para defenderlos. Dispuestos a llevar a cabo pequeñas acciones que produzcan grandes cambios. Dispuestos a sacrificar su zona de seguridad personal para que otros la compartan.Yo creo que ser de clase media en un país con cuarenta millones de pobres es ser privilegiado. Y los privilegiados tienen la obligación de regresar algo al país que les ha permitido obtener esa posición. Porque para qué sirve la experiencia, el conocimiento, el talento, si no se usa para hacer de México un lugar más justo? Para qué sirve el ascenso social si hay que pararse sobre las espaldas de otros para conseguirlo? Para qué sirve la educación si no se ayuda a los demás a obtenerla? Para qué sirve la riqueza si hay que erigir cercas electrificadas cada vez más altas para defenderla? Para qué sirve ser habitante de un país si no se asume la responsabilidad compartida de asegurar vidas dignas allí? Yo creo en la obligación ciudadana de vivir en la indignación permanente: criticando, denunciando, proponiendo, sacudiendo. Porque los buenos gobiernos se construyen a base de buenos ciudadanos y sólo los inconformes lo son.Yo creo que muchos de los miembros de esta lista logran hacer cosas extraordinarias. Aquellos que hacen más que pararse en fila y en silencio.. Individuos que pelean por los derechos de quienes ni siquiera saben que los tienen. Alejandro Martí, denunciando a los policías cómplices y acorralando a los políticos que los protegen. Carmen Aristegui, lidereando la oposición contra la impunidad y concientizando al país sobre sus efectos. Guillermo Ortiz, peleando por la competencia y denunciando los costos que el país ha pagado al obstaculizarla. María Elena Morera, sacudiendo a una sociedad aletargada y ayudándola a discernir el papel que debería desempeñar. Miguel Angel Granados Chapa, defendiendo-con su columna -- la humanidad esencial de quienes la han perdido y ayudándolos a recuperarla. Ellos y tantos más, héroes y heroínas de todos los días. Ombudsmans cotidianos. Yo creo que mientras existan individuos como muchos de los que hoy celebramos - encendidos, comprometidos, preocupados - el contagio continuará, poco a poco, y a empujones como todo lo que vale la pena. El monólogo de los líderes se convertirá en el coro de la población. La exasperación de los ciudadanos construirá cercos en torno a los políticos.Yo creo que un día - no tan lejano, quizás - habrá un diputado que suba a la tribuna y exija algo a nombre de la gente que lo ha elegido. En lugar de mirar con quién se codea en el poder, mirará a quienes lo llevaron allí. Y México será otro país, otro.. Yo creo que eso es posible, pero sólo ocurrirá cuando la fe los mexicanos aplaudidos por la revista "Quien" se vuelva la convicción de muchos.Cuando la crítica fácil se traduzca en la participación transformadora.Cuando la creencia en el cambio se concretice en acciones diarias para asegurarlo. Cuando más mexicanos memoricen las palabras de mi amigo - el empresario y filántropo -- Manuel Arango: "El que no sepa qué hacer por México que se ponga a saltar en un solo pie y algo se le ocurrirá". Cuando saltando juntos logremos, de verdad, mover mejor a México. Creo firmemente que vale la pena compartirlo con nuestra familia, amigos, compañeros de trabajo y demás personas cercanas. Hay que tomar conciencia y soñar en que todos juntos podemos cambiar a este país, para sentirnos orgullosos de heredarle a nuestros hijos y nietos un MEXICO MEJOR...

miércoles, 17 de marzo de 2010

CARLOS MARÍN Y ERNESTINA ASCENCIO

Pocas veces el Ejército Mexicano da entrevistas a los medios, sin embargo hace unos días Carlos Marín director del periódico Milenio lo logró.
En dicha entrevista con el militar, Marín saca a colación el caso de la anciana náhuatl, violada por “presuntos militares” (todo es presunción en México), y categóricamente afirma que a él le consta que el abuso del que fue objeto Ernestina Ascencio es una patraña.
Yo no sé con qué pruebas cuenta este señor para aventurar dicha afirmación, y poner en duda las declaraciones del Dr. Juan Pablo Mendizabal, que con sus 23 años de experiencia como forense , después de haber practicado la autopsia, ha declarado reiteradamente quela anciana Nahuatl fue ultrajada.
No es la primera vez que este “periodista” emite opiniones contrarias a hechos demostrados, como el caso de pederastia que documentó la periodista Lidya Cacho, por tomar un ejemplo.
Qué busca Carlos Marín con estas opiniones absurdas: ¿Tendrá línea por parte del gobierno? ¿Será el clásico mercenario del periodismo que recibe el consabido y jugoso “chayote”? O ¿Estará (no lo justifica), entrando a un evidentemente periodo senil?
Puede ser cualquiera de estas interrogantes o todas a la vez. Pero lo más grave de este personaje es que su opinión permea en ciertos sectores de nuestra sociedad, que desafortunadamente, se conforman cómodamente con escucharlo, en vez de leer otras opiniones que le den el justo balance a su juicio.
Cacho.

jueves, 11 de marzo de 2010

¡NO SE PERMITE EL ARTE EN LAS CALLES DE LA GUSTAVO A. MADERO!

Son ya varios años de andar en el trajín del arte, buscando espacios para artistas que no fueron ungidos por algún mecenas multimillonario o algún político snob que buscaba “decorar su casa”. Tocando puertas, haciendo antesalas, rumiando mi rabia en alguna oficina gubernamental por la cancelación en el momento de la cita. Haciendo propuestas por escrito, llenando formularios y todo para que al final llegue la consabida respuesta que nunca llega: “Lo vamos a estudiar y le avisamos”.
En los años ochentas pagué mi novatez al llevar a varios pintores que representaba a las “famosas casas de cultura”, fue dónde me di cuenta de varias situaciones:
-A los titulares de las delegaciones políticas no les interesa la cultura ni su difusión, sino tan sólo cubrir programas.
-Que los políticos (delegados o secretarios de cultura), van a las inauguraciones tan sólo a tomarse la foto y aventar su consabido y aburrido discurso en pro de bla, bla bla.
-Que el único día que la gente asiste a ver las exposiciones es el día de la inauguración y eso por que la gran mayoría son invitados del artista.
-Que los asistentes que no son cercanos al artista llegan para ver si hay vino de honor y libar “de a grapa”.
-Que la gente que asiste a las casas de cultura es por que básicamente tiene la intención de aprender algún oficio y lo que menos le interesa es lo expuesto ahí.
-Que el costo del evento corre por cuenta y riesgo del artista, y por último por que la lista es interminable:
-Que para el artista y su obra no pasa nada, salvo que él se dio cuenta de lo intrascendente de estos lugares y de la pérdida de tiempo y recursos que le dejó su aventura.
Quien está inmerso en este mundo sabe del viacrusis al que me refiero. Que para dar a conocer su trabajo y vivir de él es sumamente complicado sino se tienen los contactos adecuados.
Afortunadamente para ellos (los artistas), en los años sesentas surgió en México la idea europea de ocupar los espacios abiertos como jardines y parques para acercar al público sus trabajos y ¿oooh sorpresa! Les funcionó. El pionero jardín de Sullivan fue el primer espacio de estas características. Posteriormente surgieron otros como el de Coyocán, Tlacoquemecatl, San Jacinto, San Fernando, etc., etc. Sin embargo todos estos lugares tan sólo se abocaron a la parte pictórica del arte, descuidando todas las demás manifestaciones.
He comentado con varias personas y coincidimos en que es muy difícil llevar público a las casas de cultura, y que la gente en general gusta de pasear sábados y domingos al aire libre y “ver que se encuentra por ahí”; por eso la gran afluencia a los jardines o parques donde “hay algo que ver”.
Sabemos también que estos espacios culturales se han desarrollado al sur de la ciudad de México, y aún así, han logrado la asistencia de la gente de todos lados del DF y su área metropolitana.
Siempre he querido junto con el grupo de artistas que represento (Grupo Cultural touareg), crear un corredor cultural al norte del DF, pero me vuelvo a topar con lo mismo de siempre: Las autoridades y su burocratismo.
Presenté por escrito el 2 de Febrero de 2010, una propuesta a la Delegación Gustavo a Madero para crear un Corredor Cultural en GAM, y después de 29 días (7 de marzo), verbalmente me comunicaron las autoridades de la secretaría de cultura de la GAM que no se permite nada de esto en vía pública. Sin embargo veo con tristeza que cualquier puesto de garnachas, discos pirata o chácharas pueden establecerse donde quieran y son invisibles para la autoridad.
En fin no hubo sorpresas sólo decepción. Seguiremos emigrando de GAM a otras delegaciones, los artistas a buscar como acercarnos al público y el público a ver con que propuestas se tropiezan en su andar lejos de la delegación, ya que a nuestras burocráticas autoridades siguen como hace 30 años… creando elefantes blancos para llenarlos de vacío como El Centro Cultural Futurama.
Cacho.

sábado, 6 de marzo de 2010

MENTIR “HAIGA SIDO COMO HAIGA SIDO”

¡César Nava mintió! Y también Beatriz Paredes, Peña nieto, Beltrones, Calderón, Chucho Ortega, de La Madrid, Salinas, Gómez Mont, Creel, etc., etc.
No es la primera vez que los políticos están inmersos en escándalos de mentiras, impunidad o corrupción. Ya es su modus vivendi robar, engañar y solaparse unos a otros. Negociar a espaldas del pueblo no es novedad, sino su común denominador.
Nuestro país está infectado, gravemente enfermo de parasitopolitis (entiéndase políticos vividores), que avanza día con día sin visos de dejar sanar a la nación.
Cómo y cuándo empezó este grave mal, no lo sabemos, pero no podemos negar que todos somos culpables por no haberlo combatido a tiempo. Nos dimos cuenta cuando surgieron las pústulas, que aparentemente inofensivas, apestaban… y ni así nos preocupamos, las dejamos crecer y contagiar casi todo el tejido sano hasta poner al borde de la muerte a México.
Es dramático que algún ser querido como el padre, la madre, el hijo o la hermana se enfermen gravemente, entonces somos capaces de llegar hasta la muerte por salvarlos ¿o no? Pregunto: ¿Por qué no respondemos igual para salvar a nuestro país? Si ahí es donde crecimos y vivimos y donde crecerán y vivirán nuestros hijos.
Los parasitopolitis no cejan en su empeño por aniquilar a México, y nosotros con nuestra apatía les estamos permitiendo que lo hagan. Son décadas de robos, mentiras e impunidad y actualmente….un cinismo sin mesura.
¡YA BASTA!
La ciencia nos ha enseñado que un parásito no abandona a su huésped por sí sólo y que si no se le combate puede aniquilarlo. Si esperamos que lo hagan por conciencia….mejor dictemos nuestro testamento.
Los parasitopolitis proponen reformas en aras de la nación ¿Por qué creerles ahora? No nos engañemos, dejemos de hacernos pendejos ¡No van a ceder sus privilegios! Van a seguir haciendo sus reglas tan sólo para explotarnos “de manera legal”.
Propongo ignoremos sus partidos y las reglas que nos marginan. Buscar en nuestra sociedad, entre los vecinos, compañeros de trabajo o de escuela a los líderes que aman a México y quieren sacarlo adelante e Impulsarlos a través de células, tejidos y órganos nuevos que den vida al México de nuestros hijos.
Hagamos de una buena vez una alianza nacional excluyendo a esto sátrapas , mostrándoles la fuerza de una ciudadanía cansada y frustrada -no vencida-, que ya identificó que el enemigo no está afuera, sino que se encuentra entre nosotros, apoltronado cómodamente en toda su mierda legaloide que creen los hacen intocables.
“LA VIOLENCIA EMANA DE UN GOBIERNO CORRUPTO”
Cacho